La semana recién pasada fui a visitar a mi amiga Gladys y su esposo Víctor. Fue un grato encuentro, el propósito fue que ellos no se perdieran por ningún motivo la primera sesión del Taller del último Miércoles de Marzo...¡misión cumplida!...fue de gran regocijo compartir con mis dos amigos tan queridos y poder ser útil también en la obra de Dios. Por otra parte, sigo reflexionando sobre el Perdón y tengo algunos comentarios para publicar:
1. Estamos viviendo el tiempo de la Cuaresma y pienso que es un buen tiempo para pensar en nuestro Señor y en su Amor perfecto. Él nos perdona siempre...miro los acontecimientos diarios, las noticias en la TV y noto como los seres humanos estamos inmersos en cualquier cosa menos en darnos cuenta que tenemos que perdonar a nuestros enemigos o a cualquiera que nos dañe. Al contrario, personas exhiben su orgullo y soberbia como si fueran dones y alimentan el rencor, la violencia y el desprecio a sus semejantes. Tan solo yo les diría que leyesen lo siguiente en la Biblia:
"Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes." Lucas 23:33-34.
Preocupémonos, las cosas se irán poniendo cada vez más difíciles, miremos el amoroso Perdón del Señor e intentemos imitarle.
2. Dice la Santa Palabra de Dios: "Por amor de tu nombre, oh Jehová, perdonarás también mi pecado, que es grande" Salmo 25:11. Por lo tanto, para perdonar debemos suplicar a Dios que nos perdone si hemos ofendido a otros y Él nos perdonará. Basándonos en esto ya podemos pedirle que nos ponga Amor en el corazón para poder perdonar a los que nos ofenden.
Seguiremos reflexionando sobre esto.
Elena
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